Nos encantan los libros sobre empresas fracasadas y WeWork es claramente uno de los fracasos más espectaculares de los últimos tiempos.

El libro Billion Dollar Loser: The Epic Rise and Spectacular Fall of Adam Neumann and WeWork se centra inicialmente en el fundador Adam Neumann, que creció en Israel y no logró mucho allí antes de irse a los EE.UU.. Allí comenzó un primer negocio tratando de vender ropa de bebé que no tuvo demasiado éxito. Luego conoció a su cofundador Miguel McKelvey en el ascensor del edificio donde ambos trabajaban. McKelvey estaba intrigado por el hecho de que Neumann solía andar descalzo y hablar con todo el mundo.

Neumann se las ingenió para conseguir renovar un piso de un edificio vacío y junto con McKelvey abrió "green Desk" como su primer espacio de oficina compartido en 2008. Green Desk se hizo popular por el ambiente divertido y la gran cantidad de alcohol durante la hora feliz. En 2009 se deshicieron del edificio con medio millón de dólares cada uno. Con ese capital inicial, los dos decidieron empezar de nuevo y esta vez como "WeWork".

Sin tener una sola ubicación, consiguieron una ronda de capital de business angels de 15 millones de dólares equivalente a una valoración de 45 millones de dólares. El nuevo socio, un promotor inmobiliario de Nueva York les enseñó la plaza. En 2009 había muchos edificios vacíos, así que no tardaron en cerrar su primer gran trato, con Neumann hablando y Mc Kelvey ejecutando. Una vez más, se las arreglaron para crear una oferta muy convincente para los autónomos y las empresas jóvenes. 

Desde el principio, especialmente Neumann mostró una gran ambición y siguió diciendo a todo el mundo que sería una compañía de 100.000 millones y que cambiaría el mundo tal y como lo conocemos. 

A través de su esposa (una prima de Gwyneth Paltrow) también tuvo acceso a la alta sociedad de Nueva York, incluyendo a Jared Kushner e Ivanka Trump. Con estas conexiones, Neumann logró que la compañía creciera rápidamente y consiguió que se sumaran muchos inversores con valoraciones cada vez más altas. El primer paso fue una ronda serie A de 100 millones de dólares. Siguió una serie B de 440 millones de dólares, subiendo en poco tiempo a 10 mil millones en una serie E. Parte del argumento de Neumann fue que la compañía tenía un mercado potencial (TAM, Total Addressable Market) ilimitado que incluía todas las oficinas del mundo, así como vivienda (WeLive) y educación (WeLearn).

Internamente, los puestos más relevantes fueron ocupados en su mayoría por amigos personales y familiares, entre otros su esposa que en algún momento afirmó ser cofundadora.

Las cosas se salieron de control cuando Neumann conoció a Masa Son, el CEO de Softbank y quizás la única perdona que estaba aún más loca que él. Tras una reunión de 12 minutos en la parte trasera de un coche, Son aceptó invertir 4.000 millones de dólares en WeWork, que ya estaba quemando dinero sin parar. 

Uno de los trucos que Neumann fue capaz de llevar a cabo fue presentar WeWork como una "compañía tecnológica" mientras que el 99% de su negocio era inmobiliario y el 1% de tecnología ni siquiera funcionaba bien. Parte del paquete de 4.000 millones de dólares fue una venta secundaria de 361 millones del propio  Neumann, que ya había vendido cantidades significativas en rondas anteriores.

Con el dinero de Softbank, WeWork entró en modo "Blitzscaling" (un conjunto de técnicas para crecer a un ritmo vertiginoso que saca a los competidores fuera del agua), abriendo oficinas a un ritmo vertiginoso en todo el mundo. Sin embargo, surgieron problemas cuando WeWork quemó estos 4 mil millones (y alguno más) en menos de 2 años y necesitaron más dinero.

Inicialmente, Softabnk propuso duplicar la inversión, pero a los inversores de Softbank de Arabia Saudita y los Emiratos árabes no les gustó mucho la inversión, lo que dejó a WeWork con "sólo" una inversión de 2 mil millones y una salida a bolsa desesperadamente necesaria para recaudar más dinero. Para evitar lo ocurrido con Uber en su OPV, Neumann decidió que necesitaban crecer aún más para obtener una valoración alta.

Durante la preparación de los documentos, quedó bastante claro que una OPV con los términos de WeWork no funcionaría. Después de haber lanzado el folleto, quedó cada vez más claro que los inversores verían WeWork de manera muy diferente y que no aceptarían el "EBITDA ajustado a la comunidad" (beneficio antes no sólo de los intereses, impuestos, depreciación y amortización, sino también de los "gastos operativos de la construcción y la comunidad"). Muy pronto, toda la OPV fue retirada y Neumann fue finalmente expulsado de WeWork (con al menos 700 millones de dólares en sus bolsillos). 

¿Qué se aprende de esta historia?

Claramente no todos los locos con un "campo de distorsión de la realidad" se convertirán en los próximos Steve Jobs o Elon Musk. Muchos de ellos están cayendo mucho antes que Neumann y sólo muy pocos llegan hasta Jobs.  

Sin embargo, se puede llegar bastante lejos con un farol sobre el camino hacia el crecimiento. Neumann ganó al menos 700 millones de dólares, sin embargo, como muestra la historia del fundador de Zappo, el dinero no garantiza la felicidad.

Lo que también nos pareció interesante es que mientras una empresa así esté creciendo, a nadie le importa cómo sea la economía real del negocio. 

Finalmente, encontramos interesante que, al igual que General Electric, Neuman intentó desesperadamente convertirse en una "compañía tecnológica" o en un "modelo de negocio SaaS", ya que esta pegatina parece hacer el truco mágico de permitir valoraciones totalmente independientes de los beneficios.

En general, nos pareció un libro interesante. Tal vez no sea el mejor libro sobre unicornios fracasados (Bad Blood es aún mejor), pero es un recordatorio muy importante de que no todo lo que crece con fuerza y se llama a sí mismo una compañía de tecnología/SaaS vale miles de millones o incluso billones.

Actualmente hay poco que leer sobre Neumann. Parece que invierte dinero en nuevas empresas relacionadas con el sector inmobiliario, pero no parece haber creado una nueva empresa (todavía).

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Fuente / Autor: Value and Opportunity / Luis A. Hernandez

https://valueandopportunity.com/2020/12/09/book-review-billion-dollar-loser-the-epic-rise-and-spectacular-fall-of-adam-neumann-and-wework/

Imagen:  Wired

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