Los atentados terroristas en Moscú, el genocidio en curso en Gaza y el cáncer en la familia real dominaron los titulares más recientes.

Mientras tanto, en las últimas páginas financieras, en todo el mundo se acerca la implantación de las monedas digitales de los bancos centrales.

China, cuyo Yuan digital fue el principal CBDC emblemático, está inmersa en una inmensa prueba que abarca a más de 25 millones de personas. Esta semana han publicado nuevas directrices para los turistas que utilicen CBDC por primera vez.

Una periodista de DLNews, especializada en criptomonedas, escribió sobre su experiencia de uso, y aunque la funcionalidad puede parecer limitada en este momento, debemos señalar que habla del aspecto de "desdolarización" de los CBDC, alineando la moneda digital con el plan de "mundo multilateral".

Hong Kong tiene su propio programa de CBDC, cuya segunda fase de prueba se puso en marcha la semana pasada. Están desarrollando la capacidad de utilizar "depósitos tokenizados" para añadir 160.000 millones de dólares a su PIB.

En Europa, tras la Conferencia sobre el Euro Digital (DEC24) celebrada a finales de febrero, el Banco Central Europeo ha anunciado el desarrollo del "reglamento del euro digital".

En Suecia, el programa e-Krona del Riksbank publicó hace unos días su informe final sobre su proyecto piloto CBDC. Coin Telegraph informa de que están trabajando para que su CBDC esté disponible offline.

El Banco Central de los Emiratos Árabes Unidos anunció hace unos días el lanzamiento de su propio proyecto piloto de CBDC.

Eso son sólo los avances técnicos, sin hablar de la campaña de propaganda en curso.

Como ya he dicho, para atraer a la izquierda antiimperialista, se nos dice que los CBDC ayudarán al mundo a "desdolarizarse".

Otro argumento es que los CBDC ayudarán a prosperar a los países en desarrollo.

Por ejemplo, BusinessMagnates.com informa de que los CBDC ayudarán a "reactivar las economías latinoamericanas".

Y sigue y sigue y sigue.

La única excepción parece ser Estados Unidos, donde los CBDC siguen siendo un tanto polémicos.

El avance del dólar electrónico ha sido más lento que en el resto del mundo, con informes contradictorios de los funcionarios.

Podría tratarse de una oposición real de los imperialistas estadounidenses ante la amenaza de desdolarización, de una respuesta natural a una economía mucho más basada en el efectivo que la mayor parte del mundo desarrollado o de una campaña de propaganda deliberada diseñada para promover los CBDC en sectores antiamericanos.

Por supuesto, es un año electoral en el estado, y los candidatos presidenciales Donald Trump y Robert Kennedy Jr se han manifestado en contra de los CBDC. Aunque RFK jr es sin duda sincero, esta no sería la primera vez que el "estado profundo" ha tratado de desacreditar una opinión haciendo que Trump la respalde.

Pero, con Estados Unidos o sin él, el despliegue mundial de los CBDC está al caer.

Según el Atlantic Council's CBDC Tracker, 134 países que representan el 98% del PIB mundial están trabajando actualmente en su propia moneda digital.

Un informe del Atlantic Council del 14 de marzo subraya la importancia de la "interoperabilidad":

"Los bancos centrales y las instituciones financieras internacionales se están dando cuenta de que los avances tecnológicos desiguales y dispersos en las monedas digitales podrían en realidad crear una mayor fragmentación del sistema financiero, profundizar las brechas digitales y crear riesgos sistémicos. Esto socavaría la premisa de las monedas digitales, que se supone deben crear más eficiencia en el sistema existente. Afortunadamente, existen algunos modelos nuevos de interoperabilidad transfronteriza."

La interoperabilidad no es sólo una parte importante del plan CBDC, según el Atlantic Council, es todo el punto.

Recientemente, según informó Business Wire, SWIFT publicó sus conclusiones sobre la "Introducción sin fisuras de CBDC para transacciones transfronterizas":

"La interoperabilidad es fundamental para la estrategia de Swift de realizar transacciones instantáneas y sin fricciones. La cooperativa ha centrado su agenda de innovación en la interoperabilidad entre monedas digitales y activos tokenizados para superar el riesgo potencial de fragmentación, causado por el desarrollo de monedas digitales en diferentes tecnologías y con diferentes estándares y protocolos. La solución de Swift ya ha demostrado que permite realizar transferencias transfronterizas y conectar CBDC de diferentes redes entre sí, así como con monedas fiduciarias."

La interoperabilidad es el nombre del juego - no hay ninguna diferencia práctica real entre 195 monedas digitales interoperables y una moneda global.

La moneda global está al caer. No está en las portadas, pero no es de extrañar.


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Fuente / Autor: ZeroHedge / Kit Knightly

https://www.zerohedge.com/political/global-cbdc-rollout-continues-apace

Imagen: Cointelegraph

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