El FOMC y el Banco de Inglaterra se mantuvieron firmes en sus decisiones sobre los tipos de interés. Tras la decisión del FOMC, el oro y la plata cayeron como consecuencia de su declaración, antes de recuperarse ligeramente. Es evidente que la plata se encuentra en una fase bajista, mientras que los hedge funds se han desinteresado por el oro.
Fuente: Quoth The Raven, Goldmoney
A menudo, la plata lidera las subidas y este puede ser el caso. El siguiente gráfico muestra cómo el interés abierto en Comex sigue siendo bajo en ambos contratos, lo que indica que la caída es limitada.
Fuente: Quoth The Raven, Goldmoney
Este es el tipo de depresión que puede sostener un tramo alcista sustancial, por lo que, en conjunto, el peligro es estar más corto que largo. Pero hay un gran obstáculo que superar: la firmeza del dólar y el aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro.
Fuente: Quoth The Raven
No es sólo un problema de los mercados del dólar. Los dos gráficos siguientes muestran los rendimientos del bund a 10 años y del bono japonés (JGB).
Fuente: Quoth The Raven
Ambos rendimientos apenas empiezan a reflejar la transición de tipos de interés negativos a positivos, y sus gráficos muestran que van camino de subir considerablemente más. Sin embargo, nos enfrentamos claramente a una economía mundial que ya no crece, y la contracción del crédito bancario obliga a apretar a los prestatarios que no pueden hacer frente a su deuda con estos tipos de interés más altos.
Hasta ahora, los hedge funds han creído que los tipos de interés y los rendimientos de los bonos altos son malos para el precio del oro, y eso es lo que ha impulsado la relación entre el dólar y el oro. Lo más probable es que estemos pasando por una transición hacia el miedo a las perspectivas económicas y monetarias de las monedas fiduciarias.
No hay duda de que estos temores han llevado a la fortaleza del dólar en los últimos meses, porque en un mundo de monedas fiduciarias, el dólar es la seguridad. Vimos este pensamiento en la época de la crisis de Lehman y el siguiente gráfico es del oro durante ese periodo.
Fuente: Quoth The Raven
En el periodo previo a la crisis, el precio del oro subió hasta los 1023 dólares en marzo de 2008. A continuación, la crisis empezó a evolucionar hasta desembocar en la quiebra de Lehman el 15 de septiembre de 2008. La semana anterior al suceso, el oro cotizaba a 742 dólares, lo que suponía una caída del 27% desde el máximo alcanzado en marzo. Y tras un breve repunte al conocerse la noticia, volvió a caer hasta los 692 dólares el 24 de octubre, antes de repuntar hasta nuevos máximos frente al dólar.
Hay muchos otros ejemplos de una huida inicial hacia la supuesta seguridad del dólar en una crisis, hasta el punto de que deberíamos esperarla a medida que avanza la fase contractiva del ciclo de crédito bancario. Esta vez, puede que sea demasiado pronto para descartar una nueva caída del precio del oro, pero está claro que los inversores deberían estar atentos a la evolución posterior a través de la debilidad actual.
Podrían ser muy dramáticos, y conviene que el lector comprenda el cuadro siguiente.
Fuente: Quoth The Raven, Goldmoney
Consiste en todas las inversiones e intereses en dólares en manos extranjeras, tanto onshore como también en eurodólares offshore, por un total asombroso de 137 billones de dólares. Mientras tanto, los estadounidenses sólo disponen de 748.000 millones de dólares en divisas para absorber la liquidación de dólares. Y será un milagro que el aumento de los tipos de interés y de los rendimientos de los bonos no provoque una liquidación inicial de 26 billones de dólares en activos a largo plazo en tierra, lo que llevaría a una liquidación más amplia del crédito en dólares. Sencillamente, no hay casi nada para absorberlo.
Conclusión: la subida de los tipos de interés acabará desplomando el dólar. Y podría ser inesperadamente repentino.
¿Tiene oro?
Artículos relacionados:
Los inversores de oro, entre la espada y la pared
El próximo mercado alcista del oro: ¿hasta dónde llegará su precio?
Considere este y otros artículos como marcos de aprendizaje y reflexión, no son recomendaciones de inversión. Si este artículo despierta su interés en el activo, el país, la compañía o el sector que hemos mencionado, debería ser el principio, no el final, de su análisis.
Lea los informes sectoriales, los informes anuales de las compañías, hable con la dirección, construya sus modelos, reafirme sus propias conclusiones, ponga a prueba nuestras suposiciones y forme las suyas propias.
Por favor, haga su propio análisis.
Fuente / Autor: Quoth The Raven / Peter Schiff
https://quoththeraven.substack.com/p/137-trillion-reasons-to-own-gold
Imagen: Ahead of the Herd
Deja un comentario
Tu email no será publicado. Los campos requeridos están marcados con **